• Aprovechá la luz y calor solar en el hogar para iluminación y calefacción de los ambientes.
• Aprovechá el calor residual del horno apagándolo unos cinco minutos antes de terminar de cocinar los
alimentos.
• Tapá las cacerolas durante la cocción: consumirá menos energía.
• Desconectá los aparatos cuando no se utilizan.
• Apagá las luces cuando sale de la habitac ión.
• Usá pilas recargables.
• Asegurá un aislamiento térmico adecuado para mantener una temperatura interior adecuada durante todo
el año, sin la necesidad de un sistema de calefacción o aire acondicionado.
• Comprá responsablemente, productos con menos envoltorios, reciclables o reutilizables, etc.
• Reciclá bienes comunes tales como latas de aluminio, botellas de vidrio, botellas de plástico y papel.
• Plantá árboles donde sea posible, ya que los árboles absorben dióxido de carbono de la atmósfera y
devolviendo oxígeno a la misma.